miércoles, 29 de agosto de 2012

¿El señor sudor o la Señora Transpiracion?...

 En estos meses veraniegos, ¿quién no transpira?... yo diría que todos y no poco, debido a las altas temperaturas que estamos sufriendo en los últimos años, ( en esto si que se nota el cambio climático). Hoy vamos a hablar un poquito sobre el sudor, el cual aunque nos parezca antiestético en la ropa o incluso nos de un poco de “reparo”, es muy necesario… diría yo que vital!.
 Sudar es normal, nuestra piel suda para eliminar el calor de nuestro cuerpo siendo así esencial para la regulación de la temperatura. El sudor al evaporarse absorbe calor, con lo cual se enfría nuestra piel. Aunque también cumple otras funciones como proteger e hidratar la piel garantizando sus propiedades biomecánicas. Sudamos aproximadamente medio litro cada 24 horas, aunque dicha cantidad puede aumentar por la actividad física, fiebre o temperatura ambiental alta.
 Cuando sudamos demasiado (incluso cuando no realizamos ninguna actividad física) la parte del cuerpo afectada, por ejemplo las palmas de las manos, permanece continuamente mojada. Debido a esta evaporación constante la parte afectada se enfría, en el caso de las manos provocan que estas estén frías y húmedas al tacto. La sudoración excesiva de los pies puede causar problemas aun más molestos, más allá de tener la sensación de tener los pies mojados, la humedad continua favorece la proliferación de bacterias causantes del mal olor y de diversas patologías cutáneas. Esto es conocido como Hiperhidrosis o Sudoración Excesiva.
 La cantidad de sudor que emitamos, depende de la cantidad de glándulas sudoríparas que tengamos. Una persona nace con aproximadamente 2 a 4 millones de estas glándulas, las cuales comienzan a volverse totalmente activas durante la pubertad. Las mujeres de hecho tienen más glándulas sudoríparas que los hombres, pero las de los hombres son más activas
 También podemos tener el caso de falta anormal de sudor en respuesta al calor. Esta alteración puede ser dañina, debido a que la sudoración le permite al cuerpo liberar calor. El término médico para la ausencia de sudoración e Algunas veces, la anhidrosis pasa inadvertida hasta cuando se detecta que una cantidad considerable de calor o de esfuerzo no provoca sudoración, pudiendo ser potencialmente mortal, ya que el cuerpo se recalienta; sin embargo, si la ausencia de sudoración sucede sólo en un área pequeña, usualmente no es tan peligrosa.
 Con respecto al “olor” del mismo, depende de varios factores. Es bien conocido que el mal olor del sudor no es propiamente por el sudor mismo, sino por las bacterias que se alimentan de él. Esto no es por falta de higiene, pues todos cargamos en la piel millones de bacterias las cuales pueden variar a partir de la alimentación.
 La mayoría de los medicamentos producen mal olor, es el caso de suplementos alimenticios y vitaminas. Otros alimentos que producen mal olor son la carne roja, el ajo, la cebolla, la coliflor y el repollo. Los vegetarianos, por lo general, no tienen mal olor corporal. Principalmente en primavera, por los alimentos de temporada. Es cuando tienen acceso a muchas hojas verdes, que son el mejor alimento contra el mal olor. Un macrobiótico estricto jamás usaría una barra desodorante. Otros alimentos que juegan un factor importante en la sudoración son el alcohol y la sal. Ambos inhiben la desintoxicación natural de la sangre, que es por las vías urinarias. ¿Has notado el mal olor de una persona después de una noche de fiesta? Su cuerpo está tan ácido y sus riñones están tan deteriorados en ese momento que empieza a expulsar tantas toxinas como puede a través de la piel.
 Como podemos combatir este “mal olor”?, pues es bastante sencillo. El exceso de azúcar en la sangre provoca acidez y hace al cuerpo más sensible a la temperatura. Una manera de controlar tu sensación de calor es reduciendo el consumo de azúcares y carbohidratos simples…aparte de ayudarnos a controlar la línea!. Reduce el consumo de carnes, sal y alcohol. Una copa de vino, media cucharada de sal y el equivalente a una baraja de cartas de carne. Aunque suene exagerado, éstas son las cantidades recomendadas por la FDA. Es claro que hemos agigantado este máximo en las últimas décadas.
 Hacer tu dieta rica en zinc, puede ayudarnos. A este mineral se le han atribuido propiedades desodorantes. También ayuda al sistema inmune, a evitar la calvicie, mejorar el estado de ánimo y a crecer. Ostras, cangrejo, germen de trigo y huevos contienen zinc. Evita los suplementos, pues pueden contener en exceso y afectar tu salud.
 Toma más agua. Agua sola, si acaso puedes agregarle algunas gotas de limón o de toronja. A temperatura ambiente, pues el agua fría inflama el sistema digestivo. Si sigues una dieta adecuada, es importante sólo tomar agua cuando se tiene sed, pues tampoco es bueno hacer trabajar en exceso a los riñones, pero si comes con aditivos, saborizantes, agroquímicos y grasas saturadas, tu cuerpo agradecerá esa agua extra.
 Evita las telas sintéticas. Y no uses detergentes con solventes agresivos. Ayuda a tu piel a respirar. Ve lo menos cubierto posible y usando telas naturales, preferiblemente algodón.
 Uno de los mitos del resfriado es que lo causan las bajas temperaturas. Si estás sano, tu cuerpo agradecerá el sol, el viento e incluso el frío, que ayudan a la producción de vitamina D, la eliminación de toxinas y la activación del sistema circulatorio.
 Procura no usar cremas ni aceites que saturan los poros y dificultan la oxigenación de la piel. Esto hace que en los ganglios linfáticos se acumulen más las toxinas y que el sudor se expida más tóxico. Además, las cremas alteran el PH de la piel y afectan la producción natural de aceites que ya tiene nuestro organismo.
 Y sobre todo evita acumular el estrés. El estrés ocasiona que un torrente de hormonas cambie el funcionamiento de todo tu cuerpo. Esto afecta también la producción de sudor y puede ser causante de mal olor. Si crees que tu cuerpo necesita un poco de ayuda extra, prueba unas sesiones de hidroterapia o de masaje linfático. Puede que el problema se agudice los primeros días, pero pronto tendrás mejor olor y mayor salud.
R.

miércoles, 22 de agosto de 2012

Hay mi boca!...


Quien no ha tenido lo que solemos llamara, “una llaguita en la boca”?, podría afirmar sin equivocarme que prácticamente el 99% de nosotros. Estas lesiones son denominadas Aftas bucales, son terriblemente molestas y fastidiosas, en ocasiones duraderas y parece que todo, absolutamente todo incide sobre ellas, comida, la lengua, nos mordemos, etc.… Hoy vamos a hablar un poquito de ellas, como se producen, como podemos tratarlas y en caso de poder prevenirlas como poder hacerlo.
 Un afta es una pequeña úlcera o llaga abierta que aparece en el tejido mucoso que recubre el interior de la boca. Esta ser única o aparecer en grupo y  tiene un aspecto blanquecino o amarillento, con un halo enrojecido alrededor. Estas pequeñas heridas suelen localizarse en la parte interior de las mejillas, en la base de las encías, en el velo del paladar, en la lengua, y en la zona interior de los labios.
 Se trata de lesiones muy dolorosas, benignas y a diferencia de las heridas bucales causadas por determinados factores como el virus del herpes labial, no son contagiosas. Por lo general una vez se ha tenido un afta, es muy probable que esta reaparezca cada cierto tiempo, en el mismo, o en distinto lugar… son así de especiales
 Las causas de la aparición de las aftas bucales, puede estar ligada a diversos factores como los factores hereditarios, prácticamente en la mitad de los casos el paciente tiene algún pariente de primer grado que presenta esta misma afección. Los individuos cuyos progenitores (ambos) padecen el problema, tienen un 90% de probabilidades de sufrirlo. Las agresiones mecánicas, son otra causa muy frecuente de producción, ya que el simple hecho de morderse mientras se mastica la comida, o recibir un rasguño durante un tratamiento bucal o causado por un diente dañado, pueden constituir un motivo para la aparición de un afta. Así mismo, los problemas del sistema inmune como una bajada de defensas a consecuencia de un catarro o de una situación de estrés, puede dar lugar a la aparición de la lesión. El estrés, ansiedad, problemas emocionales, alergias o intolerancias a ciertos alimentos, infecciones virales, desequilibrios hormonales, (aparecen con frecuencia antes o durante el periodo menstrual), y deficiencias alimentarias, principalmente las relacionadas con deficiencia en hierro, ácido fólico y vitamina B12, son otras de las causas comunes de aparición de estas molestas “amigas” bucales.
 En muchas ocasiones, las lesiones producidas por el virus del herpes simple son también referidas como aftas bucales. Pueden apreciarse diferencias notables entre la lesión típicamente conocida como afta y el herpes labial. Este último suele localizarse alrededor de la boca, por fuera. En sus primeras etapas forma pequeñas ampollas rellenas de líquido, que posteriormente se romperán liberando su contenido. A medida que sana, irá secándose y formará una costra. La calentura (nombre que recibe coloquialmente esta lesión) es dolorosa y produce picor. El virus del herpes simple es fácilmente transmitido por contacto físico con una persona infectada o contacto con utensilios contaminados (cubiertos, cepillos de dientes, toallas...). Al igual que las aftas bucales, se trata de lesiones de poca gravedad que no requieren excesivas atenciones. Por lo general la herida desaparece por sí sola; además, en las farmacias se pueden encontrar diversos productos antivirales que disminuyen los síntomas
 Las aftas bucales son lesiones que no implican complicaciones y que desaparecen por sí mismas en un periodo normalmente no superior a 7 días. Por esta razón, en muchos casos no es necesario realizar un diagnóstico preciso, el cual consistiría en una observación directa de la lesión y en caso de recurrencias muy persistentes puede procederse a un estudio más detallado para eliminar la sospecha de otras causas u otras patologías subyacentes.
 Por lo general, las aftas suelen desaparecer al cabo de unos días sin necesidad de aplicar ningún tratamiento. Los productos que se venden en farmacias, tales como enjuagues bucales, resultan efectivos para aliviar el dolor producido por la llaga (anestésicos locales como la lidocaína al 2%). También pueden adquirirse antiinflamatorios tópicos (como los corticosteroides). Así mismo deben evitarse los alimentos muy calientes o condimentados, o aquellos que sean muy ácidos, como los cítricos. Los enjuagues deben ser suaves, y pueden comprarse en la farmacia, o prepararse en casa con una mezcla de agua templada y sal, con la que se realizarán 2 ó 3 enjuagues diarios. Mientras la herida persiste es especialmente importante mantener una higiene adecuada de la boca y cepillar los dientes tras cada comida para evitar infecciones bacterianas. Después del cepillado, se pueden emplear colutorios que contengan agentes antisépticos, que actúan contra las bacterias presentes en la boca.
 La manera más eficaz de prevenir la reaparición de las aftas es tratar de llevar una alimentación equilibrada, evitar las situaciones que nos generen ansiedad o estrés, en la medida de lo posible, y cuidar nuestra higiene y salud bucal. Además, pueden tomarse algunas medidas preventivas respecto a los alimentos que consumimos, tratando de evitar comidas ácidas, picantes, o excesivamente condimentadas.
 Como siempre digo, espero haberos aclarado algunas dudas y que esto os sirva de ayuda.
R.

lunes, 20 de agosto de 2012

Un año de Blog...

   El próximo 25 de Agosto este blog cumplirá su primer año... el tiempo ha pasado volando y lo que no creí capaz de hacer… aquí esta!, plasmado en un hueco del ciberespacio.   
   Mil gracias a tod@s los que leéis mis post, no pensé que pudiera llegar a tanta gente mis palabras, por lo que siento un enorme orgullo, además si he podido ayudar a alguien mejor que mejor!.
   Poco a poco este conato de invento ha ido madurando y lo que en un principio pensé que podría ser una dialogo entre tú y yo… (irremediablemente mi vocación ha salido a flote), ha ido derivando en una serie de temas médicos cotidianos, que sin profundizar en demasía, he tratado de hacerlos comprensibles… al menos espero haberlo conseguido!.
   De nuevo gracias por estar ahí!. Empezamos una nueva andadura rumbo al segundo año!, en la cual espero mejorar como bloguera... Hay madre, es verdad!, SOY BLOGUERA!!, ( mala como el hambre, pero bloguera!). Sinceramente no pensé cumplir años... así que ya me doy por satisfecha con este primer aniversario.
R.


viernes, 17 de agosto de 2012

Hay mi tripa!!!....

  Que frecuente es en estas fechas los “empachos”, las “malas digestiones”, las diarreas, etc.… Son fechas en las que es más fácil comer algún alimento que pueda no estar en el mejor de los estados, o que debido a las altas temperaturas nos sienten peor entre otras causas…. Hoy vamos a hablar un poquito de las gastroenteritis, como prevenirlas y sobre todo si ya la tenemos que podemos hacer.
  La gastroenteritis es una infección común de los intestinos que provoca vómitos y diarrea. La causa son las bacterias, los virus y otros gérmenes. La mayoría de las veces desaparece por sí sola al cabo de unos días. Si la diarrea y los vómitos son agudos, puede haber deshidratación, (complicación frecuente). Esto puede ser grave en los bebés y los niños pequeños.
  Los síntomas principales de la gastroenteritis son la diarrea y los vómitos. Muchas personas también tienen dolor de estómago, fiebre (temperatura alta) y dolor de cabeza. Normalmente los síntomas solo duran unos días, pero pueden durar hasta una semana.
  Si tiene diarrea y vómitos agudos o si duran bastante tiempo, puede deshidratarse. Los síntomas que puede presentar y nos orientan hacia este diagnostico son  hundimiento de los ojos, boca seca con la lengua pastosa y una cantidad de orina pequeña y muy oscura.
  Los virus son la principal causa de la gastroenteritis, estos se propagan fácilmente de una persona a otra por contacto próximo, o cuando una persona infectada prepara la comida para otros. A veces, la intoxicación alimentaría es la causa de la gastroenteritis. Existen muchos tipos de bacterias que pueden causar intoxicación alimentaria, como la Escherichia coli y la salmonella. El agua contaminada por bacterias es una causa común, sobre todo en los países con malas condiciones de salubridad.
  Debe beber mucho, sobre todo agua, para evitar la deshidratación. Algunas personas pueden tomar bebidas rehidratantes de venta en farmacias.  Procure comer si puede.  La mayoría de personas no necesita tomar medicamentos para la diarrea, pero los puede adquirir en la farmacia. No se debe administrar medicamentos para la diarrea a los niños.  Si los síntomas son graves o si no mejora, el médico de familia puede analizar una muestra de diarrea para ver si hay bacterias y darle un tratamiento complementario si fuera necesario.
  La mejor forma de prevenir la diarrea es tener una buena higiene.  Siempre debe lavarse las manos después de ir al aseo, antes de manipular alimentos, y después de trabajar en el jardín o jugar con animales domésticos.  No debe compartir toallas o paños con alguien que tenga gastroenteritis y debe lavar regularmente el aseo que use la persona infectada.
  Como podemos ver una buena higiene es fundamental. Espero haberos ayudado.
R.

jueves, 9 de agosto de 2012

....Hay mi rodilla!...

  Quien más quien menos conocemos a alguien que ha sufrido algún problema en la rodilla, concretamente en los meniscos. Hoy quiero hablaros un poco de eta lesión tan frecuente que es su rotura y que sin ser especialmente grave, si puede generar bastantes molestias hasta que se solvente.
  El menisco es un cartílago situado en el interior de la articulación de la rodilla. Tiene forma semilunar y su principal función es aumentar la profundidad de la superficie relativamente plana de la parte superior de la tibia. El menisco distribuye las fuerzas transmitidas a través de la rodilla: soporta alrededor del 40% de la carga que recibe la articulación. Además interviene en la estabilidad a la rodilla.  En la rodilla hay dos meniscos (interno y externo), que actúan como una especie de cojín entre el fémur y la tibia disipando la fuerza del peso corporal transmitida desde el muslo hasta la pierna. Esta capacidad del menisco para repartir la fuerza sobre las superficies articulares es importante porque protege al cartílago articular de un desgaste excesivo. Sin el menisco, la concentración de las fuerzas sobre un área de pequeño tamaño del cartílago articular puede dañar la superficie, conduciendo a su degeneración (artrosis).
  El menisco también aporta estabilidad a la articulación de la rodilla. Transforma la superficie tibial en una cavidad profunda. Una cavidad es más estable que una superficie plana. En ausencia del menisco, el fémur, con forma redondeada, podría deslizarse más libremente sobre la superficie plana de la tibia.
  El menisco puede romperse de varias formas. Puede desgarrarse todo el borde interno, puede desprenderse un colgajo de su borde libre, o la rotura puede ser degenerativa, donde una porción del menisco está dañada y desgarrada en múltiples direcciones.
   Las lesiones meniscales pueden afectar a cualquier edad, pero las causas son algo diferentes en los distintos grupos de edad. En los pacientes más jóvenes, el menisco es una estructura bastante resistente y elástica. Las roturas del menisco en pacientes menores de 30 años generalmente son el resultado de una lesión importante por torsión de la rodilla. Con frecuencia están relacionadas con alguna actividad deportiva. En las personas mayores, el menisco se vuelve más débil con los años. El tejido meniscal degenera y se vuelve menos resistente. Las roturas meniscales a estas edades pueden deberse a un traumatismo menor (por ejemplo, al levantarse de la posición de cuclillas). Las roturas degenerativas del menisco se ven con frecuencia como una parte integrante de la artrosis de rodilla en la población de más edad. En muchos casos, no se recuerda un traumatismo específico que haya roto el menisco.
  El problema más frecuente que aparece con un menisco roto es el dolor. Este dolor puede percibirse en la línea articular (donde se sitúa el menisco) o puede ser más difuso y apreciarse en toda la rodilla. Si la parte rota del menisco es lo bastante grande, puede producir un bloqueo: esto es la incapacidad de extender la rodilla por completo. El bloqueo ocurre cuando el fragmento roto del menisco resulta atrapado dentro del mecanismo de bisagra de la rodilla impidiendo la extensión total (imagínese introducir un lápiz en la bisagra de una puerta e intentar cerrarla). También hay consecuencias a largo plazo de una rotura meniscal. El frotamiento continuo del menisco roto sobre el cartílago articular puede causar el desgaste y fragmentación de esta superficie, conduciendo a la degeneración de la articulación. La rodilla puede inflamarse con el uso y volverse rígida y tensa. Esto se debe a la acumulación de líquido sinovial dentro de la rodilla. No es específico de las roturas meniscales, sino que ocurre cuando se inflama la rodilla por cualquier causa.
  El diagnóstico comienza con la realización de la historia clínica y la exploración. Con esto se trata de determinar dónde se localiza el dolor, si han existido episodios de bloqueo y si usted siente chasquidos o "clicks" al mover la rodilla. Las radiografías convencionales no sirven para ver un menisco roto, sin embargo son útiles para determinar si hay otras condiciones asociadas. La resonancia magnética nuclear ofrece una buena imagen del menisco. Si tras la historia clínica y la exploración aún existen dudas, o si además de la rotura del menisco se sospechan otras lesiones entonces es conveniente realizar la RMN.
  El tratamiento inicial  es el tratamiento básico de cualquier trauma (reposo, hielo, elevación y compresión), combinado con el uso de anti-inflamatorios no esteroideos y medicamentos para eliminar el dolor. Si la rodilla es estable y no se bloquea, el esquema anterior puede ser lo único que necesita, Pero si la historia y la exploración muestran claramente una lesión meniscal, puede realizarse una artroscopia para confirmar el diagnóstico y tratar el problema al mismo tiempo. La artroscopia es una intervención en la que se introduce una microcámara de fibra óptica en la articulación de la rodilla, permitiendo al cirujano ortopédico observar directamente las estructuras internas de la articulación. Realmente la artroscopia permite a su médico mirar dentro de la articulación y valorar el estado del cartílago articular, los ligamentos y los meniscos. En ciertos casos los desgarros meniscales pueden repararse, los pacientes jóvenes con roturas meniscales recientes son los candidatos ideales para la reparación, mientras que las roturas degenerativas en pacientes de edad generalmente se consideran irreparables.
R.