miércoles, 21 de marzo de 2012

Y llego la primavera....


   Diría que ha estallado la luz y el color.... pero como no cae ni gota desde hace meses, no ha estallado nada de nada.... bueno si que ha estallado... las gripes, las rinitis, conjuntivitis, los mocos y los estornudos entre otras lindeces que trae el no limpiar el ambiente de polución...
   Médicamente hablando el mecanismo de producción de una alergia es arduo y un tanto complejo, definido como un estado de hipersensibilidad adquirida por la exposición a un alérgeno. Desde el punto de vista el paciente pasa por picores, estornudos, ojos rojos, mocos, dolor de cabeza, etc.…
   Hay muchos factores desencadenantes, puede ser genética, por susceptibilidad personal, cuestión de raza, exposición profesional, infecciones que la causen, el tabaco, fármacos, alimentos, animales, plantas y un sinfín más, pero de lo que quiero hablaros hoy es de los factores ambientales que tanto nos están preocupando últimamente. El Frío, calor, radiación solar, agentes químicos… Se puede considerar que las afecciones alérgicas son uno de los tributos que tiene que pagar la raza humana en su lucha por el progreso; se ha visto un aumento de cuadros alérgicos, como por ejemplo reacciones asmáticas, en hijos descendientes de emigrantes a otro país, en comparación con los residentes en su tierra de origen. Las estadísticas demuestran que en las zonas industrializadas se registran más alergopatías que en las zonas rurales. Las emisiones producidas por vehículos, calefacciones y actividades industriales son las responsables de contaminantes como el dióxido de carbono, el dióxido de nitrógeno y el dióxido de azufre que, en determinadas concentraciones, son perjudiciales para la salud y agravantes de patologías alérgicas como el asma… Al no llover, esto se ve acrecentado en gran medida, por lo que se desencadenan más casos cada día si cabe.
   Las manifestaciones nasales, oculares y bronquiales, desencadenadas por la exposición a los antígenos ambientales (polen, ácaros, hongos) son, junto al picor de paladar y oídos, las más características. La dificultad respiratoria y los pitos (sibilancias) en el pecho desencadenados por el llanto, el ejercicio, la risa y los irritantes inespecíficos (humo, contaminación atmosférica, pulverizadores…), son signos inequívocos de la hiperreactividad bronquial (asma). Las afecciones cutáneas, como la urticaria, ciertas formas de hinchazón de partes blandas (angioedema), y algún tipo de eccema y otras lesiones de la piel, pueden aparecer conjuntamente con los otros cuadros o de manera aislada.
   Dentro de las manifestaciones respiratorias, (que suelen ser las más frecuentes), La rinitis es la inflamación de la mucosa nasal. Estornudos repetidos, congestión nasal y abundante secreción de moco (rinorrea), generalmente acompañados de inflamación (conjuntivitis) de la membrana que recubre el ojo (conjuntiva); de ahí el termino de rinoconjuntivitis. Puede asociarse con frecuencia la presencia de asma, lo cual constituye la forma de presentación mas típica del paciente alérgico a antígenos ambientales. Como manifestación dérmica hay que destacar entre muchas a la dermatitis atópica, la cual es una afección inflamatoria de la piel caracterizada por multiplicidad de lesiones: enrojecimiento, eritema, costras, exudación (secreción de líquido), vesículas, signos de rascado y escamas. Es un tipo de eccema crónico con gran componente hereditario. Aparece durante el primer año de vida, y raramente persiste después de la adolescencia. También destacan las dermatitis de contacto, originadas por sustancias que al contacto provocan reacciones alérgicas: metales como el cromo, el cobalto y, especialmente, el níquel.
   Como manifestación ocular destacamos la conjuntivitis, la conjuntiva es una membrana que recubre la zona interna del párpado y la parte anterior del globo ocular; la inflamación de dicha membrana se denomina conjuntivitis. Si es de causa alérgica suele acompañarse de síntomas nasales (rinoconjuntivitis), y es posible, además, que exista una asociación con asma bronquial en pacientes atópicos. Síntomas: intenso escozor, intolerancia a la luz (fotofobia), enrojecimiento, lagrimeo, secreción. Causas más frecuentes: pólenes, ácaros, hongos ambientales y partículas de origen animal.
   Existen varias opciones para aliviar los síntomas de la alergia. El especialista será el que decida cuál es el más indicado para tu caso en particular. En ocasiones será preciso seguir el tratamiento pautado durante varios años, y revisarlo por si hay evolución en la sintomatología y se precisara cambiar el mismo. Por lo que te recomiendo que si tienes alguno de estos síntomas o más de uno asociado, acudas a tu medico de cabecera para que te revise.
  Evidentemente podemos hacer una serie de cosas para prevenir la aparición de alergia, o sus molestos síntomas cuando la persona ya ha desarrollado la afección, lo más importante es evitar el contacto con los alérgenos, es decir, todas aquellas sustancias que desencadenan la reacción exagerada del sistema inmunitario. Sin embargo, esto no siempre es posible, ya que vivimos rodeados de sustancias potencialmente alergénicas; debemos, por tanto, seguir una serie de recomendaciones para minimizar al máximo el contacto con todas esas sustancias que pueden provocar la reacción alérgica, especialmente cuando ya sabemos cuáles son. Los padres, además, pueden tomar ciertas medidas para proteger a sus hijos mientras son pequeños, y reducir así el riesgo de convertirse en alérgicos.
   Si eres alérgico al polen aquellos lugares que concentren más cantidad de polen: parques, jardines, entornos rurales... Si no es necesario, no salgas a caminar los días muy ventosos porque el viento arrastra grandes cantidades de polen. Si tienes que salir, utiliza gafas para protegerte los ojos, e incluso una mascarilla. Si viajas en coche, hazlo con las ventanillas cerradas y recuerda que las mayores concentraciones de polen se producen a primeras horas de la mañana (entre las 5,00 y las 10,00) y a últimas de la tarde (19,00 a 22,00), así que no hagas ejercicio u otras actividades al aire libre en ese horario, y mantén las ventanas de casa cerradas. Es conveniente que tengas una secadora en casa, o al menos coloca un tendedero en el interior de la vivienda para que la ropa no permanezca al aire libre y se llene de polen y Cuando vuelvas a casa, dúchate, lávate el cabello y cámbiate de ropa, para eliminar los restos de polen que se hayan podido quedar adheridos a las prendas y a la piel
   Los ácaros son otros alérgenos muy comunes, recuerda que la decoración de la casa es muy importante en este tipo de alergia. Cuantos menos muebles y, sobre todo, adornos, menos superficies susceptibles de acumular polvo y, consecuentemente, ácaros (un gramo de polvo puede contener cientos de ácaros, Por la misma razón, debes evitar los suelos de moqueta, las alfombras, grandes cortinajes, los peluches, las sillas tapizadas, etc. Ventila la casa con frecuencia para evitar la humedad, ya que estos animales microscópicos proliferan con temperaturas superiores a los 20 ºC y humedades comprendidas entre el 70 y el 80%. Las almohadas y los colchones son auténticos reservorios de ácaros, por lo que es necesario que estén fabricados con materiales sintéticos, o enfundados en materiales no permeables. Debes lavar la ropa de cama con frecuencia, con agua a más de 65 grados. También puedes utilizar fundas anti-ácaros para proteger el colchón, las almohadas y los sofás, que son los lugares preferidos de estos seres microscópicos y en el dormitorio, elimina objetos decorativos como cuadros, posters, muñecos y peluches. En las habitaciones de los niños, los juguetes deben guardarse en armarios o cajones después de su uso. Si es posible, mantén la temperatura de la habitación entre 18 y 20ºC. Otra recomendación es que procures no tener mascotas en casa, y ten el mínimo contacto con las mascotas de tu familia y amigos, sobre todo si se trata de gatos. Si visitas a alguien que convive con gatos, es necesario que hayan aspirado la casa antes de tu llegada, y no debes tocar a los felinos ni permanecer en la misma habitación con ellos. Cuando vuelvas a casa echa a lavar toda la ropa que hayas llevado puesta, pues seguramente estará impregnada con su caspa, ya que es muy difícil de eliminar, incluso con medidas higiénicas adecuadas
   Si padeces de urticarias, utiliza ropa confeccionada con tejidos naturales como algodón o lino, y evita la lana y las fibras sintéticas. Debes lavar la ropa, incluso la de cama y aseo, con detergentes que no contengan agentes irritantes. Cuando te bañes, hazlo con agua templada y no permanezcas mucho tiempo en remojo. En tu higiene corporal, utiliza productos no alergénicos, que respeten el pH de la piel. Debes secarte con cuidado, empleando toallas suaves y sin frotar la piel, pero comprobando que no queden zonas húmedas. Es conveniente que después te hidrates con una crema adecuada a tu tipo de piel. Evita así mismo los cambios bruscos de temperatura y humedad. El sudor puede empeorar los síntomas. No te rasques ni fricciones la piel aunque te pique, puedes provocarte heridas que agraven la lesión. Evita exponerte al sol si te salen manchas en la piel, y utiliza ropa y un protector solar adecuados si vas a permanecer al aire libre, aunque esté nublado. En el caso de las dermatitis de contacto, evita todas aquellas sustancias que desencadenen los síntomas. Comprueba la composición de los productos de limpieza, aseo personal, maquillaje, etc. por si contuvieran alérgenos.
  Este tema da para mucho parloteo, me estoy dando cuenta que me emociono demasiado y no paro de teclear, si queréis seguimos tratando este tema es posteriores post, pues hay tantos tipos de alergias que uno solo no me da. Si tenéis dudas o queréis una respuesta personalizada, aquí estoy.
R.

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