lunes, 17 de agosto de 2015

.... y van 4!!

Ya van 4 años juntos!... parece que fue ayer cuando me decidí a abrir este Blog, decía mi abuela que el tiempo no pasa,,, pasamos nosotros por el tiempo, y tenia toda la razón.
Si bien es cierto que en el ultimo año no he escrito todo lo que quisiera, estoy intentando subsanar ese "sutil olvido": Aprovecho la ocasión para deciros que si estáis interesados en algún tema en concreto o queréis saber algo en especial, me lo digáis... las ideas no me sobran y como dice el refrán, las cosas compartidas son mas divertidas!.
Espero que estéis teniendo un magnifico y tranquilo mes de Agosto, para los que cagáis vacaciones, a disfrutarlas!, los que ya las habéis cogido... a no desesperar!, y los que estéis ahora mismo con tiempo libre... no leáis esto!, ya habrá tiempo en septiembre!!.
R.

lunes, 10 de agosto de 2015

... Tengo un lunar...

...Quien no tiene un lunar?, todos pensamos en Cindy Crawford y su celebre lunar junto a los labios... son siempre "buenos" los lunares?.. son siempre "malos"?... NI lo uno ni lo otro... como en todo hay particularidades y siempre hay que vigilarlos y estar atentos a cualquier cambio que notemos. hoy veremos unas pinceladas sobre este importante tema.
Los lunares comúnmente conocidos, representan grupos de células que normalmente forman parte de la piel. Sin embargo, por alguna razón estas células proliferan descontroladamente dando lugar a lesiones de color café claro u oscuro sobre la superficie de la piel que los dermatólogos denominan nevus. 
Los lunares que aparecen de repente pueden volverse peligrosos y es necesario quitarlos, así como aquellos que no son circulares, tienen dos o mas tonalidades o son demasiado negros y tienen mas de 6 milímetros de tamaño o cuando alguno de los lunares sufre un traumatismo: se golpea, sangra, se corta. De igual manera se deben quitar siempre aquellos lunares que se localizan en las palmas y plantas de los pies debido a que siete de cada diez melanomas aparecen por este tipo de lunares. En general, se recomienda acudir al dermatólogo una vez al año para realizar un control rutinario. Éste verificará todas las zonas del cuerpo, sobre todo pies y manos, que son zonas de riesgo.
Hay una serie de factores que aumentan el riesgo de padecer un melanoma, y éstos determinan que existan grupos de personas con mayor probabilidad de desarrollarlo. Entre ellos cabe destacar:
*Tener la piel o el pelo claros. 
*Presencia de nevus atípicos. 
*Presencia de nevus en una cantidad superior a 40. 
*Presencia de nevus congénitos. 
*Tener antecedentes familiares de nevus atípicos, de melanoma o de ambas cosas. 
*Haber sufrido una o más quemaduras severas por el sol, especialmente si se han producido en la infancia, pues el efecto de la irradiación solar es acumulativo. 
*Haber estado expuesto muchas horas a rayos ultravioleta (sol, UVB, UVA) aunque tenga la piel totalmente bronceada.
El dermatólogo es el primer interlocutor que retira el lunar molesto o quien redirige el paciente a un cirujano plástico. La mayoría de estos lunares se retiran mediante una pequeña cirugía que se realiza generalmente en la propia consulta. Cuando las lesiones son ya sospechosas de cáncer, es necesario su análisis microscópico. El personal médico extirpa el lunar completo y, a continuación, dan puntos de sutura profundos con hilo reabsorbible y puntos de sutura superficiales que se retiran una semana después de la operación. La cicatriz suele ser, en general, un poco más larga que el diámetro del lunar en sí, aunque con el tiempo puede llegar a desparecer.
El segundo método es el denominado "shaving". Se corta el lunar en la superficie con un bisturí con anestesia local, pero no se retira por completo y en algunos casos, puede volver a crecer. Este método se suele practicar en lunares que no presenten un riesgo, pero no se recomienda para lunares grandes (con un diámetro > 1 cm), ya que la cicatriz podría generar una pérdida de dermis. En el resto de casos, el shaving permite dejar una cicatriz mínima o incluso no dejar cicatriz.
Además, los lunares también se pueden quemar con laser en menos de un minuto pero, en ese caso, no se pueden analizar en un laboratorio. Esta técnica se reserva para los lunares que no presenten riesgos a simple vista.
Por otro lado, existen en la piel madura unas lesiones denominadas queratosis seborreicas o seniles. Se tratan de lesiones benignas muy frecuentes que van apareciendo de forma gradual en la piel por encima de la tercera década y que no tienen ninguna significación. Se trata de un hallazgo normal en la piel por encima de edades medias de la vida. 
Muchos pacientes confunden estas lesiones con lunares, ya que también tienen coloración marrón, son abultadas y del mismo tamaño. Las queratosis seborreicas tienen un tacto rasposo y hay muchos pacientes que refieren que les pican y acuden a la consulta pensando que son lunares.
Ahondaremos más en este tema tan importante y a veces tan desconocido por todos.
R.